QUIERO

Me acerco, sigilosamente, a un estado del que a veces me había burlado...
No quería dependencia, 
ni lo quería con rapidez.
Tan solo quiero...

Mirarte a los ojos sin temer alejarnos;
pasear por las calles, cogidos o no, pero dirigiéndonos hacia el mismo lugar; 
compartir canciones, discutiendo sobre nuestros gustos musicales entre carcajadas;
subir al ascensor y susurrarnos palabras picantes, preparando el terreno para llegar a tu cama;
conocer un cuerpo;
que me revuelvan las pecas;
darte las buenas noches tan cerca que me quite el sueño;
despertar contigo sin preguntarme si quizás querrás desayunar hoy juntos;
encontrar lugares nuevos para visitarlos con nuestros besos;
tener conversaciones que no se acaban nunca, en mi templo, donde ahora habito sola;
escucharnos;
recibir un abrazo con sorpresa, tus manos en mis caderas y tu boca sonriendo en mi nuca;
descubrir que tus defectos nunca vencerán tus afectos;
besos en silencio sobre mi espalda;
quiero a alguien (cuando y cuanto sea posible).