Me olvidé. Y cuando volví a recordar tuve envidia de mí misma. No aproveché suficiente esas caricias. A veces lo especial pasa desapercibido, que gran error...
Ahora cerrando los ojos recuerdo las veces que no recordé.
Las caricias que pasaron desapercibidas aunque mi piel se erizase con ellas.
¿Tanto miedo
Siendo así, lo único que puede pasar es que me vuelva a romper, sabiendo que puedo recomponer las piezas de nuevo, aunque no vuelva a ser la misma. Otra vez...
Suave y sin miedo, como en esta foto, con delicadeza.
P.D: Play & Dance: No me pidas que te bese porque e besaré- MaCaCo